lunes, 9 de noviembre de 2009

20 AÑOS SIN EL MURO DE BERLÍN


El 9 de noviembre de 1989 caía el muro de Berlín. Con el finalizaba la Guerra Fría entre EEUU y la URSS y empezaba una época de sueños e ilusiones por un nuevo mundo de paz y concordia que, con el tiempo, se fueron diluyendo.

El muro fue construido en 1961 por la República Democrática Alemana (Alemania oriental) para evitar la fuga de sus trabajadores (la mayoría con alta formación) a la Alemania Occidental y para establecer un punto de sutura entre los valores de ambas partes. El objetivo demográfico no fue alcanzado como preveían. Sin embargo, el ideológico se cumplió con gran acierto para ellos. Consiguió crear una frontera entre un mismo país, entre 2 ideologías y entre dos bloques económico-sociales. Pero también lo hizo entre familias y amigos, divididos por imposición.

Apodado “Muro de la vergüenza” por los occidentales y “Muro de Protección Antifascista” por los comunistas, se convirtió en el epicentro de la batalla entre EEUU y la URSS. Una batalla de provocaciones y amenazas que derivó en enfrentamientos bélicos indirectos en países ajenos pero nunca en territorio propio.

Tras 28 años desde su construcción, el 9 de noviembre de 1989 cayó el muro de Berlín. Ocurrió por la presión externa, por el desgaste del bloque soviético y por la constante fuga de la población de la Alemania Oriental a otros países (principalmente por Austria y Checoslovaquia). Su caída significó la apertura hacia una nueva vida para la población alemana y para el mundo en general. Pero también supuso la caída del bloque soviético, que no puedo aguantar por mas tiempo con la imagen externa que quería dar pero que, al mismo tiempo, le condenaba al fracaso. Una caída inesperada por unos pero muy asumida por otros.

Recordamos ese momento como también lo recuerdan las decenas de familias que quedaron destrozadas por la muerte de sus familiares. Supuestamente (no se sabe con certeza) fueron 192 las personas que murieron mientras intentaban saltar el muro en busca de la libertad que todos deseaban y que solo ellos se atrevieron a reclamar.

Un nuevo mundo comenzó en ese momento. Al final, no mejor ni peor, sino distinto. Un mundo en el que sigue habiendo guerras, en el que se sigue pasando hambre y en el que cada vez hay menos para mas.

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